A los dirigentes de Independiente se les complicó el panorama con respecto al mercado de pases, ya que Marco Pellegrino y Kevin Lomónaco podrían despedirse rápidamente del club a partir del 30 de julio, el plazo límite puesto por Milan y Bragantino, respectivamente, para que se levanten las millonarias inhibiciones y que puedan inscribir a los jugadores.
Una vez transcurrido ese tiempo, los "refuerzos" tienen la potestad de negociar con cualquier otro club. Lo de Pellegrino, por ejemplo, era hasta el 20 de junio, pero la Comisión Directiva hizo una gestión en el medio y Milan cedió 10 días más. Mientras tanto, las caras nuevas siguen trabajando en el predio de Villa Domínico.
Independiente tiene que conseguir un total de 5.500.000 de dólares para saldar las cuatro deudas que tiene. La más complicada es la de Gastón Silva, quien quiere cobrar todo el dinero que le deben en un pago después de muchas negociaciones inconclusas.
Las inhibiciones cayeron a través de la FIFA, por lo que requieren de una operación más engorrosa para llevarlas adelante. Algunas son con clubes y otras directamente con los jugadores, como Fernando Gaibor, otro de los casos.
Ya es sabido que tanto Pellegrino como Lomónaco no estarán habilitados para visitar este jueves a Instituto en Córdoba, en el marco de la reanudación de la Liga Profesional 2024. Tampoco son muy optimistas de cara al duelo del próximo martes frente a Barracas Central en Avellaneda, por la séptima fecha.
Este no es un panorama ideal para Vaccari, quien se muestra algo inquieto y preguntando permanentemente a los dirigentes puertas adentro, mientras intenta motivar al plantel. Por lo pronto, el DT escucha a unos dirigentes que le trasladan cierto optimismo ante las urgencias de un plantel que, por citar una falencia, no tiene centrales en el banco de suplentes. <i>(TyC Sports)</i>